Con el fin de examinar la función y la estructura de los órganos, el PET- TC, utiliza pequeñas cantidades de materiales radiactivos (comúnmente llamados trazadores) inyectados en áreas específicas del cuerpo; incluyendo el corazón, el cerebro, los riñones y la tiroides. Este tipo de imágenes se utiliza a menudo para ayudar a diagnosticar y tratar diferentes condiciones médicas y enfermedades.