Allopurinol phoenix - Información, expertos y preguntas frecuentes

Uso de Allopurinol phoenix

Hipouricemiante por inhibición de la síntesis de ácido úrico. Código ATC: M04AA01.

Indicaciones

Allopurinol está indicado para reducir la formación de urato/ácido úrico en condiciones en las cuales ya ocurrió depósito de urato/acido úrico (por ejemplo: artritis gotosa, tofos en la piel, nefrolitiasis) o en un riesgo clínico predecible (por ejemplo: tratamiento de neoplasias malignas que potencialmente puede derivar en nefropatía aguda por ácido úrico). Las principales condiciones clínicas en las cuales puede haber depósito de ácido úrico son: gota idiopática; litiasis de ácido úrico; nefropatía aguda por ácido úrico; enfermedades neoplásicas y enfermedades mieloproliferativas con alta tasa de recambio celular, las cuales llevan a un aumento en los niveles de ácido úrico ya sea espontáneamente o luego del tratamiento citotóxico; ciertas alteraciones enzimáticas que llevan a una sobreproducción de ácido úrico, por ejemplo: hipoxantina-guanina fosforribosil-transferasa, incluyendo el síndrome de Lesch-Nyhan; glucosa-6-fosfatasa incluyendo enfermedades por depósito de glucógeno; fosforribosil pirofosfato sintetasa, fosforribosil pirofosfato amidotransferasa; adenina fosforribosiltransferasa. Allopurinol está indicado para el manejo de cálculos renales de 2,8-dihidroxiadenina (2,8-DHA) relacionados con la actividad deficiente de la adenina fosforibosiltransferasa. Allopurinol está indicado para el manejo de cálculos renales recurrentes mixtos de oxalato de calcio en presencia de hiperuricosuria, cuando medidas higiénico dietéticas han fallado.

Precauciones especiales

Dosificación

Dosis en adultos: ALLOPURINOL PHOENIX debe iniciarse a bajas dosis por ejemplo 100 mg/día para disminuir el riesgo de que aparezcan eventos adversos y debe aumentarse sólo si la respuesta del ácido úrico sérico no es satisfactoria. El siguiente esquema de dosis es el recomendado: 100 a 200 mg por día en condiciones leves; 300 a 600 mg por día en condiciones moderadas-severas; 700 a 900 mg por día en condiciones severas. Si se requiere ajustar la dosis según mg/kg, debe usarse 2 a 10 mg/kg de peso/por día. Dosis en niños: niños menores de 15 años: 10 a 20 mg/kg/día hasta un máximo de 400 mg por día. El uso de ALLOPURINOL PHOENIX en niños es raro, excepto en condiciones malignas (especialmente leucemia) y ciertos desórdenes enzimáticos tales como síndrome de Lesch-Nyhan. Dosis en ancianos: en ausencia de datos específicos, debe usarse la menor dosis que produzca una reducción satisfactoria del ácido úrico. Se debe prestar particular atención a las recomendaciones descriptas en dosis en insuficiencia renal y advertencias y precauciones. Dosis en insuficiencia renal: ya que ALLOPURINOL PHOENIX y sus metabolitos son eliminados por vía renal, la insuficiencia renal puede llevar a la retención de la droga y/o sus metabolitos con la consecuente prolongación de la vida media. En insuficiencia renal severa, puede recomendarse usar menos de 100 mg por día o usar dosis únicas de 100 mg por intervalos mayores que un día. Si está disponible el monitoreo de las concentraciones de oxipurinol, la dosis debe ser ajustada para mantener un nivel de oxipurinol debajo de 100 micromol/litro (15,2mg/litro). ALLOPURINOL PHOENIX y sus metabolitos se remueven por diálisis. Si se requiere diálisis dos o tres veces a la semana, se debe considerar un esquema alternativo de dosis de 300-400 mg de ALLOPURINOL PHOENIX inmediatamente luego de cada diálisis y sin ninguna dosis en el intervalo interdiálisis. Dosis en insuficiencia hepática: deben usarse dosis de ALLOPURINOL PHOENIX reducidas en pacientes con insuficiencia hepática. Se recomienda realizar periódicamente análisis de función hepática durante el inicio del tratamiento. Tratamiento de condiciones con alta tasa de recambio celular, por ejemplo neoplasias, síndrome de Lesch-Nyhan: se recomienda corregir la hiperuricemia y/o hiperuricosuria con ALLOPURINOL PHOENIX antes de iniciar el tratamiento citotóxico. Es importante garantizar una adecuada hidratación para mantener una diuresis óptima e intentar alcalinizar la orina para aumentar la solubilidad del urato/ácido úrico en orina. La dosis de ALLOPURINOL PHOENIX debe ser la mínima del esquema recomendado. Si la nefropatía por urato u otra patología han comprometido la función renal, deben seguirse las indicaciones dadas en "Dosis en insuficiencia renal". Estos pasos pueden reducir el riesgo de que el depósito de xantinas y/o oxipurinol complique la situación clínica. Véase también "Interacciones medicamentosas y Reacciones adversas". Recomendación de monitoreo: la dosis debe ser ajustada por el monitoreo sérico de las concentraciones de urato y los niveles urinarios de urato/acido úrico en intervalos apropiados. Instrucciones de uso: ALLOPURINOL PHOENIX puede ser ingerido vía oral una vez al día luego de una comida. Es bien tolerado, especialmente luego de los alimentos. Si la dosis diaria es superior a 300 mg y la tolerancia gastrointestinal se manifiesta, un régimen de dosis divididas puede ser apropiado.

Farmacología

Acción farmacológica: Allopurinol es un inhibidor de la xantina-oxidasa. El allopurinol y su principal metabolito, el oxipurinol, disminuyen el nivel de ácido úrico en plasma y orina al inhibir la xantina oxidasa, que es la enzima que cataliza la oxidación de hipoxantina en xantina y de la xantina en ácido úrico. Además de inhibir el catabolismo de la purina, en algunos pacientes hiperuricémicos se inhibe la biosíntesis ulterior de novo de la purina por retroinhibición de la hipoxantina guanina fosforibosiltransferasa. Otros metabolitos de allopurinol incluyen allopurinol-ribósido y oxipurinol-7-ribósido. Farmacocinética: Absorción: Allopurinol es activo cuando se lo administra vía oral y es rápidamente absorbido en el tracto gastrointestinal superior. Estudios han detectado allopurinol en sangre luego de 30-60 minutos de administrada la dosis. La biodisponibilidad estimada varía entre 67% y 90%. El pico plasmático de allopurinol generalmente ocurre aproximadamente 1,5 hora luego de la administración oral, pero cae rápidamente y es apenas detectable luego de 6 horas. El pico plasmático de oxipurinol ocurre generalmente luego de 3-5 horas luego de la administración oral de allopurinol y se sostiene por más tiempo. Distribución: La unión con las proteínas plasmáticas del allopurinol es insignificante, por lo que no se cree que las variaciones en la unión proteica afecten significativamente la eliminación. El volumen aparente de distribución del allopurinol es aproximadamente 1,6 litro/kg, de donde se desprende que hay una absorción relativamente extensa en los tejidos. No se han determinado las concentraciones de allopurinol en los diferentes tejidos humanos, pero es probable que las mayores concentraciones tanto de allopurinol como de oxipurinol se encuentren en el hígado y la mucosa intestinal, que es donde hay una elevada actividad de la xantina oxidasa. Metabolismo y excreción: Aproximadamente un 20 % del allopurinol ingerido se elimina con las heces. La principal vía de eliminación del allopurinol es la conversión metabólica en oxipurinol mediada por la xantina oxidasa y la aldehído oxidasa, en tanto que menos de un 10 % del fármaco se elimina intacto con la orina. El allopurinol tiene una vida media plasmática de entre 1 y 2 horas aproximadamente. El oxipurinol es menos potente que el allopurinol como inhibidor de la xantina oxidasa, pero su vida media plasmática es mucho más prolongada. Se estima que, en seres humanos, su vida media oscila entre 13 y 30 horas. Por lo tanto, con una monodosis diaria de allopurinol, la inhibición efectiva de la xantina oxidasa dura más de 24 horas. Los pacientes con función renal normal acumulan oxipurinol gradualmente hasta alcanzar concentraciones plasmáticas estacionarias. En general, 300 mg diarios de allopurinol les permiten alcanzar concentraciones plasmáticas de oxipurinol de entre 5 y 10 mg/litro. El oxipurinol se elimina intacto con la orina, pero tiene una vida media de eliminación prolongada porque sufre reabsorción tubular. Según se ha informado, la vida media de eliminación varía de 13,6 horas a 29 horas. La amplitud del rango puede deberse a las variaciones en el diseño de los estudios y/o la eliminación de creatinina de los pacientes. Características en grupos especiales de pacientes: Farmacocinética en pacientes con insuficiencia renal: El clearance de allopurinol y oxipurinol se reduce considerablemente en pacientes con deterioro de la función renal resultando en niveles plasmáticos más altos con el tratamiento crónico. Pacientes con insuficiencia renal, donde los valores de creatinina fueron 10 y 20 ml/min, mostraron concentraciones de oxipurinol de aproximadamente 30 mg/litro luego de tratamiento prolongado con 300 mg de allopurinol por día. Esta es la concentración aproximada que se alcanzaría con dosis de 600 mg/día en pacientes con función renal normal. Se requiere una reducción en la dosis en pacientes con insuficiencia renal. Farmacocinética en pacientes ancianos: La cinética de allopurinol no es alterada por otra condición que no sea el deterioro de la función renal (véase Farmacocinética en pacientes con insuficiencia renal).

Contraindicaciones

Allopurinol no debe administrarse a individuos con conocida hipersensibilidad al allopurinol y/o a cualquiera de sus excipientes.

Advertencias

Allopurinol debe ser discontinuado inmediatamente si aparece alguna erupción cutánea u otra evidencia de sensibilidad ya que esto podría resultar en reacciones de hipersensibilidad más serias (incluyendo síndrome de Stevens-Johnson y necrólisis epidérmica tóxica). Se debe reducir la dosis en pacientes con insuficiencia hepática o renal. Pacientes bajo tratamiento para la hipertensión arterial o insuficiencia cardíaca, por ejemplo diuréticos o inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA), pueden tener insuficiencia renal concomitante y allopurinol debe ser usado con precaución en este grupo. La hiperuricemia asintomática per se no es generalmente considerada una indicación para el uso de allopurinol. Medidas higiénico dietéticas, como por ejemplo una correcta hidratación, con el manejo de la condición de base pueden corregir la condición. Ataque agudo de gota: el tratamiento con allopurinol no debe iniciarse hasta que el ataque agudo de gota haya desaparecido por completo, ya que otros ataques pueden ser precipitados. En los inicios del tratamiento con allopurinol, como con otros agentes uricosúricos, se puede precipitar un ataque de gota agudo. Por lo tanto, se recomienda administrar profilaxis con un anti-inflamatorio adecuado o colchicina por al menos un mes. Debe consultarse la literatura para la dosis correcta y precauciones y advertencias. Si se desarrolla un ataque agudo en pacientes recibiendo allopurinol, el tratamiento debe continuarse a la misma dosis mientras el ataque agudo es tratado con un agente anti-inflamatorio adecuado. Depósito de xantinas: en condiciones donde la tasa de formación de ácido úrico está marcadamente aumentada (por ejemplo: enfermedades malignas y su tratamiento, síndrome de Lesch-Nyhan) la concentración absoluta de xantinas en la orina podría, en raros casos, aumentar lo suficiente para permitir su depósito en el tracto urinario. El riesgo puede ser minimizado con adecuada hidratación para alcanzar la óptima dilución de la orina. Impacto de cálculos renales de ácido úrico: el tratamiento adecuado con allopurinol puede llevar a la disolución de grandes piedras de ácido úrico en la pelvis renal, con una remota posibilidad de impactar en el uréter. Intolerantes a la lactosa: los comprimidos de allopurinol contienen lactosa y por ende, no deben administrarse a pacientes con raros problemas hereditarios de intolerancia a la lactosa, como por ejemplo: la deficiencia de Lapp-lactasa o malabsorción de glucosa-galactosa. Interacciones medicamentosas: 6-mercaptopurina y azatioprina: La azatioprina se metaboliza en 6-mercaptopurina, que se ve inactivada por la acción de la xantina oxidasa. Las dosis de azatioprina y mercaptopurina deberán reducirse a la mitad, pues la inhibición de la xantina oxidasa prolonga su actividad. Vidabarina (adenina arabinósido): la evidencia sugiere que la vida media plasmática de vidabarina está incrementada en presencia de allopurinol. Cuando ambos productos son usados concomitantemente se requiere una vigilancia extra para reconocer los posibles efectos tóxicos incrementados. Salicilatos y agentes uricosúricos: El oxipurinol, el principal metabolito del allopurinol y, de por sí, un agente terapéuticamente activo, se excreta por vía renal de manera similar al urato. Por lo tanto, es posible que la administración de uricosúricos como probenecid o salicilato en dosis elevadas aceleren la excreción del oxipurinol. Esto disminuiría la actividad terapéutica del allopurinol, aunque la importancia de esta disminución debería evaluarse caso por caso. Clorpropamida: si allopurinol es administrado concomitantemente con clorpropamida cuando la función renal es deficiente, puede haber riesgo de actividad hipoglucemiante prolongada porque allopurinol y clorpropamida pueden competir por la excreción en el túbulo renal. Anticoagulantes orales: ha habido reportes raros de aumento del efecto de la warfarina y otros anticoagulantes cumarínicos cuando se co-administran con allopurinol, por lo tanto, todos los pacientes recibiendo anticoagulantes deben ser cuidadosamente monitoreados. Fenitoína: El allopurinol puede inhibir la oxidación hepática de la fenitoína, aunque no se ha determinado la importancia clínica de este hallazgo. Teofilina: se ha reportado inhibición del metabolismo de la teofilina. El mecanismo de interacción puede ser explicado en que la xantina oxidasa esta involucrada en la biotransformación de la teofilina en el humano. Los niveles de teofilina deben ser monitoreados en pacientes que inician tratamiento con allopurinol o aumentan la dosis. Penicilinas del grupo A de tipo ampicilina/amoxicilina: se ha informado que los pacientes que recibieron ampicilina o amoxicilina junto con allopurinol presentaron erupción cutánea con mayor frecuencia que quienes no recibieron ambos fármacos simultáneamente. No se ha establecido la causa de esta asociación. De todas maneras, se recomienda, siempre que sea posible, buscar una alternativa a la ampicilina o la amoxicilina en pacientes que reciben allopurinol. Ciclofosfamida, doxorrubicina, bleomicina, procarbacina, mecloretamina: Se ha informado que, en presencia de allopurinol, la ciclofosfamida y otros agentes citotóxicos produjeron mayor supresión de la médula ósea en pacientes con enfermedad neoplásica (diferentes a la leucemia). Sin embargo, en un estudio bien controlado de pacientes tratados con ciclofosfamida, doxorrubicina, bleomicina, procarbacina y/o mecloretamina (clorhidrato de mustina), el allopurinol no pareció aumentar la reacción tóxica de estos agentes citotóxicos. Ciclosporina: De algunos informes se desprendería que las concentraciones plasmáticas de ciclosporina aumentarían durante la terapia concomitante con allopurinol. Si se van a coadministrar ambos fármacos, se debe considerar la posibilidad de una mayor toxicidad por ciclosporina. Didanosina: Tanto en voluntarios sanos como en pacientes con virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) tratados con didanosina, la Cmáx y el ABC (Área bajo la curva) de esta droga se elevaron aproximadamente hasta el doble cuando se coadministró allopurinol (300 mg/día) sin que se observaran cambios en la vida media terminal. En general, se desaconseja la coadministración de estos dos fármacos. Si resulta inevitable, quizás haya que reducir la dosis de didanosina y habrá que controlar atentamente a los pacientes. Carcinogénesis, mutagénesis y trastornos de fertilidad: Estudios citogenéticos mostraron que allopurinol no induce aberraciones cromosómicas en células sanguíneas humanas in vitro a concentraciones de hasta 100 mg/ml e in vivo a dosis de hasta 600 mg/día por un período medio de 40 meses. Allopurinol no produce compuestos nitrosos in vitro ni afecta la transformación linfocítica in vitro. Evidencias de investigaciones bioquímicas y citológicas sugieren fuertemente que el allopurinol no tiene efecto sobre el ADN en ningún estadio del ciclo celular y no es mutagénico. No existe evidencia de carcinogenicidad en ratones ni ratas tratadas con allopurinol durante más de 2 años. Efectos teratogénicos: Un estudio en ratones que recibieron dosis intraperitoneales de 500 a 100 mg/kg en los días 10 y 13 de gestación resultó en anormalidades fetales; sin embargo, en un estudio similar en ratas con dosis de 120 mg/kg en el día 12 de gestación no se observaron anormalidades. Estudios más extensos con altas dosis de allopurinol en ratones con dosis hasta 100 mg/kg/día, ratas con dosis hasta 200 mg/kg/día y conejos con dosis hasta 150 mg/kg/día durante los días 8 y 16 de gestación no produjo efectos teratogénicos. Estudios in vitro utilizando glándulas salivales de ratón en cultivo para detectar embriotoxicidad indicó que no es de esperar que allopurinol cause embriotoxicidad sin causar también toxicidad materna. Embarazo: No existe evidencia adecuada sobre la seguridad de allopurinol en mujeres embarazadas, aunque se lo ha usado desde hace muchos años sin que aparentemente haya habido consecuencias indeseadas. Allopurinol sólo se debe usar en el embarazo cuando no haya ninguna alternativa más segura y cuando la enfermedad en sí acarree riesgos para la madre o el feto. Lactancia: Los informes indican que el allopurinol y el oxipurinol se excretan a través de la leche materna humana. Se ha comprobado la presencia de concentraciones de 1,4 mg/litro y 53,7 mg/litro de allopurinol y oxipurinol respectivamente en la leche materna de mujeres que tomaban 300 mg/día de allopurinol. Sin embargo, no existe información sobre los efectos del allopurinol o sus metabolitos en el lactante. Uso en ancianos: Dosis en ancianos: en ausencia de datos específicos, debe usarse la menor dosis que produzca una reducción satisfactoria del ácido úrico. Se debe prestar particular atención a las recomendaciones descriptas en dosis en insuficiencia renal y advertencias y precauciones. La cinética de allopurinol no es alterada por otra condición que no sea el deterioro de la función renal (véase Farmacocinética en pacientes con insuficiencia renal). Uso en insuficiencia hepática y renal: El clearance de Allopurinol y oxipurinol se reduce considerablemente en pacientes con deterioro de la función renal resultando en niveles plasmáticos más altos con el tratamiento crónico. Pacientes con insuficiencia renal, donde los valores de creatinina fueron 10 y 20 ml/min, mostraron concentraciones de oxipurinol de aproximadamente 30 mg/litro luego de tratamiento prolongado con 300 mg de allopurinol por día. Esta es la concentración aproximada que se alcanzaría con dosis de 600 mg/día en pacientes con función renal normal. Se requiere una reducción en la dosis en pacientes con insuficiencia renal. Dosis en insuficiencia hepática: deben usarse dosis de allopurinol reducidas en pacientes con insuficiencia hepática. Se recomienda realizar periódicamente análisis de función hepática durante el inicio del tratamiento. Efectos sobre la capacidad de conducir y operar maquinarias: Ya que en pacientes bajo tratamiento con allopurinol se han reportado reacciones adversas tales como somnolencia, vértigo, ataxia, debe tenerse precaución antes de manejar, operar maquinaria o participar en actividades peligrosas hasta que se esté razonablemente seguro que allopurinol no afecta el rendimiento en dichas tareas.

Efectos adversos y efectos secundarios

No existe ninguna documentación clínica actualizada que sirva para determinar la frecuencia de eventos adversos con este producto. Los eventos adversos tendrán una incidencia variable según la dosis y los agentes terapéuticos concomitantes. Las reacciones adversas que se detallan más abajo se agruparon estimativamente en categorías de frecuencia. En la mayoría de los casos, no hay datos adecuados para calcular la incidencia efectiva. Las reacciones adversas identificadas en la vigilancia post-comercialización se consideraron infrecuentes o muy infrecuentes. Para clasificar las reacciones adversas según su frecuencia, se usó la siguiente convención: Muy frecuentes ≥1/10 (≥10 %). Frecuentes ≥1/100 y Infecciones e infestaciones: Muy rara: Forunculosis. Trastornos hematológicos y linfáticos: Muy infrecuentes: Agranulocitosis, anemia aplásica, trombocitopenia. Se han consignado casos muy infrecuentes de trombocitopenia, agranulocitosis y anemia aplásica, sobre todo en individuos con nefropatías y/o hepatopatías, lo que confirma la necesidad de prestar atención especial a este grupo de pacientes. Trastornos del sistema inmunológico: Poco frecuentes: Reacciones de hipersensibilidad. Muy infrecuentes: Linfadenopatía angioinmunoblástica. Se han presentado casos infrecuentes de reacciones de hipersensibilidad grave; entre ellas, algunas reacciones cutáneas exfoliativas, fiebre, linfadenopatía, artralgia y/o reacciones eosinofílicas como síndrome de Stevens-Johnson, y necrólisis epidérmica tóxica (ver Trastornos de la piel y tejidos subcutáneos). Las vasculitis y las respuestas histológicas asociadas al medicamento se pueden manifestar de diversas maneras, entre ellas, hepatitis, nefropatías y, en casos muy infrecuentes, ataques. Se han consignado casos muy infrecuentes de ataque anafiláctico agudo. Si se llegara a producir un ataque anafiláctico en cualquier momento del tratamiento, la terapia con allopurinol se debe discontinuar de inmediato y definitivamente. Para las reacciones de hipersensibilidad cutánea se pueden indicar corticosteroides. En general, cuando se manifestó algún tipo de hipersensibilidad generalizada, existía un problema renal o hepático subyacente, sobre todo en los casos fatales. Se han descrito casos muy infrecuentes de linfadenopatía angioinmunoblástica tras la extirpación de una linfadenopatía generalizada. Al parecer, resulta reversible con la discontinuación de allopurinol. Trastornos metabólicos y nutricionales: Muy infrecuentes: Diabetes mellitus, hiperlipidemia. Trastornos psiquiátricos: Muy infrecuentes: Depresión. Trastornos del sistema nervioso: Muy infrecuentes: Coma, parálisis, ataxia, neuropatías, parestesias, somnolencia, cefalea, disgeusia. Trastornos oftalmológicos: Muy infrecuentes: Cataratas, trastornos de la vista, degeneración macular. Trastornos del oído y el laberinto: Muy infrecuentes: Vértigo. Cardiopatías: Muy infrecuentes: Angina, bradicardia. Vasculopatías: Muy infrecuentes: Hipertensión. Trastornos gastrointestinales: Poco frecuentes: Vómitos, náuseas. Muy infrecuentes: Hematemesis recurrente, esteatorrea, estomatitis, alteración del ritmo intestinal. En estudios clínicos más antiguos, se documentó la presencia de náuseas y vómitos. De acuerdo con informes posteriores, esta reacción no es un problema serio y se puede evitar tomando el allopurinol después de las comidas. Trastornos hepatobiliares: Poco frecuentes: Elevaciones asintomáticas en valores hepáticos. Infrecuentes: Hepatitis (inclusive necrosis hepática y hepatitis granulomatosa). Se han consignado casos de disfunción hepática sin evidencia expresa de hipersensibilidad más generalizada. Trastornos de la piel y tejidos subcutáneos: Frecuentes: Erupción. Infrecuentes: Síndrome de Stevens-Johnson/necrólisis epidérmica tóxica. Muy infrecuentes: Angioedema, erupción fija producida por fármacos, alopecia, decoloración capilar. Las reacciones cutáneas son las más frecuentes y pueden manifestarse en cualquier etapa del tratamiento. Pueden presentarse reacciones pruriginosas, maculopapulares, a veces con descamación, a veces purpúricas y rara vez exfoliativas, como el síndrome de Stevens-Johnson y la necrólisis epidérmica tóxica. Si se presenta alguna de estas reacciones, el tratamiento con Allopurinol se debe discontinuar de inmediato. Si se considera adecuado, una vez superadas las reacciones leves, se puede reiniciar el tratamiento con allopurinol, primero utilizando dosis bajas (por ejemplo, 50 mg/día) y luego aumentando la dosis gradualmente. Si la erupción reaparece, se debe concluir el tratamiento con allopurinol definitivamente, pues puede que surjan reacciones de hipersensibilidad más graves. En estudios farmacogenéticos retrospectivos de control de caso realizados sobre pacientes con orígenes Chino Han, Japonés y Europeo, se identificó el alelo HLA-B*5801 como uno de los factores de riesgo genético implicados en el síndrome de Stevens-Johnson o la necrólisis epidérmica tóxica asociados al allopurinol. Se calcula que poseen el alelo HLA-B*5801 hasta un 20 o un 30 % de las poblaciones China Han, Africana e India y solo un 1 o un 2 % de los pacientes Europeos del norte, Estadounidenses de origen Europeo y Japonés. Sin embargo, no se ha establecido el valor del genotipo como criterio para la toma de decisiones en relación con el allopurinol. La base para la toma de decisiones sigue siendo el diagnóstico clínico de síndrome de Stevens-Johnson/necrólisis epidérmica tóxica. Si se llegaran a producir estas reacciones en cualquier momento del tratamiento, la terapia con allopurinol se debe discontinuar de inmediato y definitivamente. Se ha documentado la presencia de angioedema con o sin signos y síntomas de hipersensibilidad más generalizada. Trastornos renales y urinarios: Muy infrecuentes: Hematuria, uremia. Sistema reproductivo y trastornos mamarios: Muy infrecuentes: Infertilidad masculina, impotencia, ginecomastia. Trastornos generales y eventos propios del sitio de administración: Muy infrecuentes: Edema, malestar general, astenia, fiebre. Se ha documentado la presencia de fiebre con o sin signos y síntomas de hipersensibilidad más generalizada a allopurinol.

Preguntas sobre Allopurinol phoenix

Nuestros expertos han respondido 1 preguntas sobre Allopurinol phoenix

No siempre es de por vida y se deben hacer analisis periodicamente por ejemplo cada 6 meses aproximadamwnte

¿Qué profesionales prescriben Allopurinol phoenix?


Todos los contenidos publicados en Doctoralia, especialmente preguntas y respuestas, son de carácter informativo y en ningún caso deben considerarse un sustituto de un asesoramiento médico.